Muy buenas a todos, como podrán ver ya estoy de vuelta, luego de unas merecidas vacaciones. Pense que serian más largas pero resulto que ya estoy preparado para volver, además en mi vuelta influyo mucha gente que me decía que no dejara el blog, a las cuales le estoy muy agradecido.
Bueno les cuento que estuve de vacaciones por Viveiro o Vivero, en la provincia de Lugo, aprovechando que era Semana Santa y que en esta ciudad se realizan las conocidas procesiones de Semana Santa.
Más allá de que no soy creyente, es un verdadero espectáculo.
Y viendo estas procesiones, he comprobado que aquella frase que dice "la fé mueve montañas" es verdadera, porque deben tener mucha fé los costaleros que llevan las imágenes en sus hombros. Es que realizan un esfuerzo inhumano, porque ustedes no se imaginan lo que pesan esas imágenes y algunos hasta hacían el recorrido descalzos. Se les notaba en la cara el sufrimiento y el cansancio, pero lo que más me impacto sin duda fue ver a uno de los costaleros bañado en cera, la cual le caía desde una vela situada en una de las imágenes. Y todo este trabajo lo preparan todo el año y lo hacen movidos por la fé, ya que no les pagan un duro por ello.
Pero además de las procesiones, Viveiro es una ciudad muy bonita, con su ría y rodeada de montañas. En pocas palabras Viveiro, es la perfecta armonía entre la naturaleza y el cemento.
Así que si no tienen muy claro el destino de sus próximas vacaciones les recomiendo Viveiro,para que lo tengan en cuenta .
Un saludo y hasta otra.
Bueno les cuento que estuve de vacaciones por Viveiro o Vivero, en la provincia de Lugo, aprovechando que era Semana Santa y que en esta ciudad se realizan las conocidas procesiones de Semana Santa.
Más allá de que no soy creyente, es un verdadero espectáculo.
Y viendo estas procesiones, he comprobado que aquella frase que dice "la fé mueve montañas" es verdadera, porque deben tener mucha fé los costaleros que llevan las imágenes en sus hombros. Es que realizan un esfuerzo inhumano, porque ustedes no se imaginan lo que pesan esas imágenes y algunos hasta hacían el recorrido descalzos. Se les notaba en la cara el sufrimiento y el cansancio, pero lo que más me impacto sin duda fue ver a uno de los costaleros bañado en cera, la cual le caía desde una vela situada en una de las imágenes. Y todo este trabajo lo preparan todo el año y lo hacen movidos por la fé, ya que no les pagan un duro por ello.
Pero además de las procesiones, Viveiro es una ciudad muy bonita, con su ría y rodeada de montañas. En pocas palabras Viveiro, es la perfecta armonía entre la naturaleza y el cemento.
Así que si no tienen muy claro el destino de sus próximas vacaciones les recomiendo Viveiro,para que lo tengan en cuenta .
Un saludo y hasta otra.
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